martes, 27 de febrero de 2018

Historia de desamor

Hola!

Esta entrada es muy diferentes a las que suelo traer. Esta entrada es un cuento sobre el desamor.

En algún lugar del mundo se encuentra un hombre famoso en su comarca por la triste historia que os voy a contar.
-3 de Abril de 1803
El marques de Bencatés, se encontraba un día en su dulce morada, recostado en su cama mirando hacia la ventana que tenía enfrente. Es por ahí que por ese enorme ventanal, pudo divisar a una hermosa dama, la cual seguía toda la calle hacia abajo.
El hombre salió rápidamente de su cama, abrió la puerta y bajo las escaleras, abrió la puerta de abajo para saber hacia donde se dirija esa muchacha. Además pudo observar detenidamente y mejor a la chica: Un pelo negro y ondulado, una piel blanca y unos hermosos ojos color café.
El marques se enamoró perdidamente de ella, es en ese momento que se dirigió a su dormitorio y se vistió velozmente. Marcho rápidamente de su casa hacia la dirección donde recordaba que se había ido la mujer. En unos instantes se encontró con ella y es en ese momento en el que el marques se dispuso a hablarla, pero los nervios se apoderaron de el y no pudo decirla nada.
La muchacha continuo su camino y el marque se dispuso a seguirla. La mujer se detuvo delante de la puerta de una casa, respiró profundamente y entró.
El señor marques tras esto volvió a su casa, y se puso a pensar sobre la manera en la que se podía dirigir a ella. El mayor problema que tenía, era que no podía no ponerse nervioso, tras toda una tarde practicando enfrente del espejo el marques se tumbo en su cama y se durmió.
Era al día siguiente y el marques volvió a ver a esa mujer desde lo lejos. Bajo tan rápido como pudo y abrió la puerta, en ese momento la dama paso por enfrente suya y el hombre llamó su atención. Después de esto volvió a no poder decir ni una sola palabra, por  lo que la mujer tomo la iniciativa y le saludo alegremente.
- Hola 
-Hola- respondió tímidamente el marques- soy el Marques de Bencatés, pero usted me puede llamar   Alfrei
-Encantad- le respondió- yo soy Leindra, no es por molestar, pero tengo prisa si quieres mañana a   esta misma hora podemos seguir hablando.
Y así fue, todos los días los dos se vieron cada mañana y llegaron a un punto en el cual ambos se enamoraron. Es por esto que un día decidieron verse una noche en casa de Alfrei.
Esa misma noche él le pregunto a Leindra sobre porque cuando ella llega a su casa, ella cambia su estado de animo normalmente alegre a una profunda tristeza.
Ella le confesó que sus padres murieron y vive con su hermano Alex, el cual abusa de ella y ademas de que la maltrata porque nunca esta conforme con nada. Fue en ese tiempo en el que Leindra le contaba su historia, Alfrei pudo distinguir una serie de heridas en su cuerpo.
De repente se comienzan a oír una serie de gritos y golpes en la puerta.
Era el hermano, estaba enfurecido por la falta de su hermana, Alfrei abrió la puerta y el hombre se abalanzo sobre el, Leindra consiguió separarles y cayó al suelo. Mientras Alfrei estaba despistado el hombre consiguió coger una espada que se encontraba expuesta en la pared.
Alfrei consiguió defenderse como pudo. Alfrei vio en la chimenea un pincho para remover las cenizas y los troncos, la cogió y comenzó a contraatacar.
Después de esa intensa lucha Alfrei consiguió arrebatarle  la espada. Quería acabar con la vida del hombre que tanto daño le hizo a su amada, que la rabia se apodero de el, y en el momento antes de asentar esa estocada Leindra se colocó en frente de su hermano. La espada atravesó a los dos acabando con sus vidas.
Alfrei llorando agarro fuertemente el cuerpo sin vida de Leindra. Unos minutos más tarde llegaron los guardias de la ciudad alertados por el ruido.
Los guardias se encontraron con ambos cadáveres y al pobre Alfrei al lado.
El pobre hombre fue arrestado y condenado a muerte.
Y sí ese hombre del que os he hablado soy yo. Estoy escribiendo esto como últimas palabras y para que la gente conozca la verdadera historia de lo que pasó.
Fin






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